Sueños, imágenes caprichosas que mezclan nuestros recuerdos, alborotan
nuestra memoria durante noches y noches, horas y horas... Los sueños
están ahí, cada noche, dentro de tu cabeza. Nadie puede verlos excepto
tú porque son tuyos. Sin embargo no puedes controlarlos, dependen de sí
mismos aunque se alimentan de ti, pero son simplemente sueños. En los
sueños todo es posible: volar, amar lo odiado, vivir lo que nunca has
vivido, morir y volver a nacer... De los sueños puedes aprender, puedes
olvidarlos... lo único que no debes hacer jamás es depender de ellos
porque los sueños no respetan la razón ni el sentido, por eso nadie
debería tener poder sobre los sueños de otro.